martes, 18 de noviembre de 2008

Primer sol

Querida Carmen:

Quisiera saber escribir tan bien como Mario Vargas Llosa para poder decirte sin sentimentalismos que te me vas; bueno, te nos vas. Pero no lo consigo. Y que, para colmo, nos dejas sin tu media sonrisa que espero nos sigas mandando a través de los 1281 Km que nos separarán a partir del sábado. Yo, a cambio, te enviaré un sol…

También quisiera poder transmitirte lo importante que ha sido tu amistad para mí durante estos meses y todo lo que me has ayudado: todo lo que te he aprendido: desde cómo escribir comillas angulares hasta cómo cuidar una tortuga.

Esta carta debería (pero no lo va hacer) terminar con un soliloquio sobre la principal de tus virtudes: la valentía; sobre todo porque la creaste con tus propias manos: te la ganaste.

Esta epístola se ha vuelto rebelde (como tú) y al final deviene en homenaje. Y que mejor dedicatoria que tu canción. La letra, desde luego, va contigo; el vídeo conmigo.

¿Te ha gustado tu primer sol?

No hay comentarios: