viernes, 14 de noviembre de 2008
La ruptura
Ventanas, puertas, paredes y alfombras, sillas, mesas y flores, pan, vino, mantequilla y mermelada, fritanga, carne, habas y todas las especias. Desde hace dos semanas, no sé cómo saben estas cosas. Sólo espero tomarme una taza de nieve sucia. Aeropuertos, estaciones del ferrocarril, carreteras, calles y líneas brumosas. Tráfico, luces, coches y aviones, barcos, bicicletas y caminantes. Ahora me estoy meditabundo, cegado, en la ciudad. Me rodeo de las torres, hechas de nieve sucia. Caras, oídos y vientres, partes posteriores, piernas, dedos y pies. Sudor, lágrimas, cuerpos que gotean, fiestas, alguien está jodiendo. Ahora estoy en silencio en esta nieve, en este país nevoso. Estoy colgado hasta que sea viejo, más viejo que ahora.
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