lunes, 17 de noviembre de 2008

Entrevista onanista

Estoy frente al ordenador un poco resfriado (yo, no el ordenador) y me empiezo a preguntar por los virus, por lo primeros microorganismos, por el origen de la vida en la Tierra, por la formación del planeta, de la Vía Láctea, del universo… incluso me planteo:
Auto-pregunta (a partir de ahora AP): ¿cómo y cuándo nace Quásar?
Auto-respuesta (a partir de ahora AR): Quásar nace donde mueren los sueños: al despertar. Alejandro y yo éramos dos post-adolescentes que no habían cumplido los veinte años; poseíamos una guitarra, un bajo y demasiada imaginación. Solíamos ensayar a primera hora de la tarde. Un día, en la siesta, soñé que teníamos éxito y nos llamábamos Los posesos del heavy metal; cuando sonó el despertador, en ese momento indeterminado entre la vigilia y el sueño, un genio maligno me susurró al oído: “Quásar suena mejor”. Le hice caso.
AP: Es un inicio lúdico y triste, ¿ves así la música?
AR: Desde luego la música ha de ser un juego. Es una pasión y un arte en el que participamos todos los componentes del grupo. De hecho, así surgen las canciones: uno de nosotros se inventa un riff con el que nos divertimos: lo desmenuzamos, lo doblamos, lo arrugamos, lo extendemos, lo desdibujamos, lo esbozamos, lo perfilamos, le damos color, brillo y forma. Al final, Alejandro crea una melodía para la voz y yo la letra.
AP: No me has contestado del todo, ¿la música es triste?
AR: No, en absoluto. La música es bella y está por encima de toda clasificación sentimentaloide o maniquea. Todos hemos llorado al escuchar alguna melodía que nos recuerda a algo o alguien, pero eso no quiere decir que la canción sea triste. Lo que nos emociona es la pérdida de algo bueno que una vez fue nuestro; y ese recuerdo es alegre. Canciones tristes sólo son las de Bustamante.
AP: La verdad es que decir en la presentación de tu disco que te gusta porque lo han compuesto pensando en ti [Busta dixit] sí que es un poco triste, ¿cómo compusiste las letras de S?
AR: Antes que nada quiero aclarar que Su nombre es de Alejandro, mientras que Susurros es de Luis, el anterior batería, por lo que me centraré en el resto de los temas. Sé que suena a tópico, pero cuando escribo, lo hago sobre sensaciones que he experimentado, o que he vivido desde muy cerca. Hubo un teórico de la literatura que decía que todo poema malo es sincero y creo que tenía mucha razón, por eso siempre intento componer en la resaca del sentimiento, cuando uno lo tiene presente, pero ya te deja pensar un poquito. Aunque no siempre lo he conseguido: Sus redes, Sonata para el cielo y Sin ti son los paradigmas del cuándo no debo escribir.
AP: Muchas gracias por mi tiempo, pero no tenemos más espacio.
AR: Gracias a ti por el mío.

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