Eres dueña de mis
sueños
y pululas entre
ellos
contagiándolos de
ti.
Ya hace tiempo
que, enamorados,
se abandonaron a
tu esencia
recostándose en
tu sonrisa.
Yo creo que es
por tu materia:
porque estáis
hechos de lo mismo:
tan imposibles
sois como quiméricos.
¿O quizá sea
porque aun sin conocerte
has sido la mujer
que me reclamaban?
En cualquier
caso, me da lo mismo,
ya desde siempre
me venciste
y sólo quiero
ser, para ti, un sueño más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario